Hay quienes toman una infusión de hinojo por la noche porque les ayuda a relajar y coger el sueño. Otros lo toman en infusión para los gases. Los argumentos para tomarla son de lo más variado, así que hemos preguntado a Javier Echavarren, dietista-nutricionista, cuánto hay de cierto en los beneficios que se atribuyen a la infusión de hinojo.
¿Qué es el hinojo?
El hinojo es una planta herbácea de origen mediterráneo que puede crecer hasta dos metros de altura. Tiene tallos largos y hojas en forma de aguja, de color verde intenso y con un sabor y olor aromático parecido al anís. Desde hace siglos las distintas civilizaciones han usado esta planta – sobre todo, sus semillas – con fines medicinales o de bienestar.
Los efectos serán de un tipo u otro dependiendo de la parte de la planta que se emplee. "La composición química de los principios activos en las distintas partes de la planta es tan rica y variada que permite obtener diferentes utilizaciones”, apunta Echavarren, miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética. “Por eso, los usos que se atribuyen al hinojo en diferentes culturas son tan amplias".
Hinojo: una infusión llena de principios activos
Entre los distintos principios activos que podrían asociarse a las propiedades del hinojo en infusión encontramos básicamente sustancias fitoquímicas de una amplia variedad química, que va desde aceites esenciales, monoterpenos (alfa-beta-pineno, limoneno, canfeno), fitoesteroles (beta-sitosterol, estigmasterol), flavonoides (kenferol, quercetol, rutósido, quercitrósido), etc.
Utilizaciones beneficiosas del hinojo, ¿funcionan todas igual?
Con toda esa lista de principios activos es fácil entender por qué según a quién le preguntemos, nos responderá que toma un ‘té de hinojo’ esperando tal o cual beneficio. En la fitoterapia tradicional, se le atribuyen efectos muy diversos: antiflatulento (combate los gases), antiespasmódico gastrointestinal, estrogénico, aperitivo-eupéptico, antiinflamatorio, expectorante antimucolítico, antiséptico de vías digestivas, respiratorias y urinarias, antimicrobiano, antibacteriano y antifúngico, hipotenso (para bajar la tensión), diurético, antioxidante, hipocolesterolémico (para bajar el colesterol)…
Echevarren reconoce que se trata de un amplio elenco abierto a las percepciones de las personas que lo consumen, "aunque ninguno de estos efectos son propiedades avaladas por la evidencia científica. En particular, ninguno está reconocido por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) como propiedades saludables".
Ahora bien, "el hecho de que tenga potenciales acciones farmacológicas asociadas a sus fitoquímicos, no significa que pueda eventualmente recomendarse para todos estas situaciones de salud", apunta.
“Esto sucede con muchas plantas: aunque tengan muchos principios activos, solo se emplean en rigor para lo que han demostrado tener una mayor efectividad por tener mayor concentración de algunos de sus componentes. Para poder atribuir acciones fisiológicas concretas se debe seguir investigando en la aplicación de sus concentrados a las diferentes situaciones patológicas.
En el caso del hinojo, las propiedades que siguen siendo más estudiadas por la ciencia se resumen en cuatro:
- carminativas (reducción de gases)
- digestivas hinojo con propiedades para adelgazar
- expectorantes
- galactógenas (aumento de la producción de leche)
No todo son beneficios, también tiene contraindicaciones
Como sucede con otras muchas plantas medicinales, un mal uso puede tener riesgo de toxicidad o efectos secundarios no deseados.
- neurotóxico. Con dosis muy altas de su aceite esencial anetol.
- riesgo hormonal. Por su contenido fitoestrogénico deben evitar su consumo las personas con cáncer hormonodependiente de estrógenos (cáncer mamario).
- inhibidor antibiótico. “Se debe evitar su uso cuando se esté tomando ciprofloxacino (antibiótico) porque tiene un efecto inhibidor cercano al 50%", apunta el experto.
El Consejo de ALDI
Con este calor es normal que no quieras ni oír hablar de infusiones calentitas. ¡Pero no renuncies a tus infusiones favoritas! Retira las bolsitas, déjalas enfriar en la nevera y sírvelas bien fresquitas, incluso con hielo.
Javier Echavarren. Dietista-nutricionista y Miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética. Diplomado y Grado de Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Navarra. Participa en la formación del primer Colegio de Dietistas Nutricionistas de España. Trabaja en consulta privada desde hace 19 años. Gerente de Herboristería Ezkaba. Ha recibido formación en fitoterapia, complementos dietéticos y sigue realizando formación continua. Su especialidad es la Iridología, siendo autor de la Iridología de Reflejo Múltiple.