De un tiempo a esta parte, el salvado de trigo se ha convertido casi en un ingrediente más a tener en la despensa. Muchos ciudadanos, principalmente con problemas de tránsito intestinal, lo toman habitualmente hasta incorporarlo a su dieta habitual.
Pero aún surgen muchas dudas respecto a este alimento, como si engorda, si se puede consumir con otros cereales o si tiene contraindicaciones. Para resolver todas estas cuestiones contamos con Marianela Elsa Fernández D´Eboli, dietista-nutricionista especializada en Nutrición Clínica y del Deporte y miembro del Grupo GE-NuDAFD de la Academia Española de Nutrición y Dietética.
¿Qué es el salvado de trigo?
Los granos de los cereales se componen principalmente de tres elementos: salvado, germen y endospermo. El salvado lo forman todas las capas que rodean el interior del grano, protegiendo así el endospermo y el germen, las dos partes imprescindibles para el ciclo vegetativo de la planta. Supone un 13-17% del grano. Es rico en celulosa y hemicelulosas, sales minerales, vitaminas y compuestos bioactivos.
Desde un punto de vista comercial, el salvado de trigo se define como el producto resultante del proceso de molienda procedente de las capas externas o cubiertas del grano del cereal que quedan después de extraer la harina o sémola.
Las características del salvado de trigo quedan especificadas en el artículo 4 del Real Decreto 677/2016, por el cual se aprueba la norma de calidad para las harinas, las sémolas y otros productos de la molienda de los cereales.
¿Existe el salvado de trigo integral?
El término ‘integral’ vende más. Por eso en ocasiones podemos verlo en algunos productos, si bien siendo rigurosos no puede hablarse de salvado de trigo integral. “Un cereal integral mantiene el endospermo, el salvado y el germen. El proceso de molienda simplemente los reduce a partículas finas. Si ofrecemos solo el salvado, ahí ya hay un proceso de refinado, por lo que no podemos hablar de cereal integral”, explica Fernández D´Eboli.
En otras palabras, la denominación correcta es salvado de trigo a secas, y no salvado integral de trigo.
Composición nutricional del salvado de trigo.
Tal y como se sabe a nivel popular, el salvado de trigo es alto en fibra. “Está compuesto por aproximadamente por un 53% de fibra dietética dentro de la cual encontramos los xilanos, la lignina, la celulosa, los galactanos, los b-glucanos y los fructanos”, especifica la dietista-nutricionista.
Además, “contiene proteínas, grasas, vitaminas, minerales y compuestos bioactivos, como alquilresorcinoles, ácidos fenólicos, flavonoides, carotenoides, lignanos y esteroles”.
Beneficios del salvado
Los beneficios del salvado de trigo para la salud están relacionados principalmente con su contenido de fibra.
Tránsito intestinal
Como se compone mayoritariamente de fibra insoluble, es resistente a la fermentación de las bacterias del colon. “Esta circunstancia incrementa el volumen fecal mediante retención de agua, promueve el peristaltismo intestinal, disminuye el tiempo de tránsito y facilita la excreción”, explica.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) señala que este efecto beneficioso se consigue consumiendo 10 gramos de fibra de salvado de trigo al día.
Diverticulitis y otras enfermedades no transmisibles
Una dieta rica en fibra, entre ellas, las contenidas en el salvado de trigo “previene la diverticulosis y protege frente a diversas enfermedades crónicas como las cardiovasculares, la diabetes, el síndrome metabólico y algunos tipo de cáncer”.
También contribuye a mantener el peso corporal.
Contraindicaciones del salvado de trigo
Dietas bajas en fibra
A pesar de la buena fama que tiene este alimento, ante algunas situaciones debe ser restringido. El ejemplo más evidente son las dietas bajas en fibra. “Dichas dietas pueden estar indicadas, entre otros, en episodios diarreicos o para la preparación de determinadas pruebas médicas”. La dieta previa a una colonoscopia es un buen ejemplo de cuándo hay que eliminarlo.
Patologías digestivas
También debe evitarse cuando se padecen determinadas patologías, como la enfermedad de Crohn obstructiva, la diverticulitis aguda o en las fases activas de ciertas patologías, como el síndrome del colon irritable con diarreas, o enfermedades inflamatorias intestinales, como la colitis ulcerosa.
Enfermedad celíaca
Además, hay que tener en cuenta que contiene gluten, por lo que deben evitar su consumo las personas con celiaquía e intolerancia al gluten no celíaca.
Cómo tomarlo para aprovechar sus beneficios
Las recomendaciones dietéticas de fibra se sitúan entre 25 y 35 gramos diarios. Ahora bien, la ración adecuada de salvado de trigo “variará según la persona dependiendo, entre otras cosas, de la cantidad de fruta y hortalizas que suela consumir; si incluye o no cereales integrales; y la frecuencia de consumo de legumbres y frutos secos”.
Si un individuo suele consumir poca cantidad de fibra y quiere aumentarla con el salvado de trigo, debe tener en cuenta que si consume más de 20 o 30 gramos diarios, “le puede producir gases y, por tanto, distensión abdominal”.
¿El salvado de trigo engorda?
La dietista-nutricionista es muy clara: "No hay ningún alimento que per se provoque un aumento de peso. El incremento del peso corporal se produce, simplificándolo al extremo, cuando el total de calorías de la dieta ingerida es superior al gasto calórico de la persona”, explica. “Ahora bien, el salvado de trigo tiene un aporte calórico considerable: 264 kilocalorías por cada 100 gramos, que aunque no traduzca en energía real pues una gran parte no se metaboliza, es un aporte que deberá tenerse en cuenta en el planteamiento general de la dieta”.
Además de esa energía, cada 100 gramos aportan 15 gramos de proteínas, 18 gramos de hidratos de carbono y 45 gramos de fibra alimentaria y 4,7 gramos de grasa.
¿Es beneficioso tomar agua de salvado de trigo?
La experta señala que los beneficios del salvado de trigo los obtenemos al tomar el salvado de trigo y no solamente el agua de éste, a pesar de que algunos nutrientes solubles hayan podido pasar al agua de remojo. Otra cuestión sería ingerir el agua con el salvado. “En este caso, sí que se obtendrán los beneficios. Aunque esta opción es menos apetitosa que en otras preparaciones”, concluye.
Ideas para incorporarlo a nuestra dieta
Existen multitud de recetas con salvado de trigo, así como platos en los que se puede incorporar con facilidad.
- Añadirlo al yogur o la leche
- Como ingrediente de macedonias de frutas
- Cocinado, en galletas o barritas caseras
- En ensaladas con otros ingredientes
- En sopas y purés
- Con batidos y helados
El Consejo de ALDI
La actividad física moderada estimula los movimientos intestinales y puede contribuir a aliviar el estreñimiento de forma natural. ¡Recuerda que la OMS recomienda al menos 150 minutos de actividad física a la semana!
Marianela Fernández D'Eboli. Dietista-nutricionista. miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética y Miembro de la Academia Miembro del Grupo de Especialización Deportiva NuDAFD. Graduada en Nutrición Humana y Dietética (2015), Máster Oficial en Nutrición en la Actividad Física y el Deporte (2016) e ISAK nivel II (2022). Tiene 15 años de experiencia trabajando con deportistas en diversas modalidades, tanto amateurs, como de élite. Actualmente dirige su propia Consulta de Nutrición en Gandía: Nutrigandia. Ha colaborado en la creación e implantación de programa de educación nutricional en los colegios, tanto a profesores como alumnos, para el Ayuntamiento de Gandía. (desde 2017 a la actualidad). Ha participado en formaciones en colegios, centros culturales, universidad, institutos, ayuntamientos, FP (desde 2008 a la actualidad). INSTAGRAM y FACEBOOK: @Nutrigandia