Con la aparición de las redes sociales, especialmente Instagram y TikTok, los mitos, leyendas e incluso falsedades relacionadas con alimentos se han multiplicado. Prueba de ello es la proliferación de los supuestos superalimentos, un heterogéneo grupo de alimentos con supuestas propiedades y beneficios casi milagrosos donde podemos encontrar a la chía, las bayas de goji o el té rojo, entre otros.
De esta infusión se dice que ayuda a adelgazar, que afecta al sueño, que aumenta la presión arterial, que ayuda en la concentración, que produce estreñimiento, que cuida el sistema cardiovascular, que reduce el estrés… Irene Fernández-Espada, dietista-nutricionista y miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética, analiza cuánto hay de cierto en esas afirmaciones.
Origen del té rojo o pu-erh
El té rojo o Pu-erh lleva el nombre de su origen geográfico, la ciudad de Pu’er, situada en la región de Yunnan (China), donde se recolectan las hojas frescas de Camellia sinensis. Tras la recolección, las hojas se secan al sol, se enrollan y se dejan fermentar y posfermentar. Este proceso genera cambios físicos, bioquímicos y microbianos en el té. No solo cambia su tono verde por tonalidades rojizas, también adquiere otros caracteres organolépticos, como su aroma y sabor amargo característicos.
Diferencias entre té rojo y té verde
Entre las principales diferencias entre té rojo y té verde, Irene Fernández-Espada, destaca que “los tés totalmente fermentados y posfermentados, como el pu-erh, presentan más antioxidantes, como teaflavinas y tearubiginas, que el té verde. Por el contrario, este tiene más niveles catequinas y flavinas, también antioxidantes”.
El siguiente cuadro elaborado por la experta muestra otras diferencias:
Té rojo | Té verde | |
Nivel de fermentación | Posfermentado Fermentación en pila (autooxidación no enzimática y oxidación enzimática) | No fermentado |
Microbios | 88% del total son hongos. Esto le proporciona un sabor suave, ligeramente amargo y su color rojo parduzco | No |
Propiedades del té | Aspecto áspero y ceniciento Sabor amargos Ligeramente astringentes | Olor crudo, amargo y herbáceo |
Compuestos responsables del aroma | β-Damascenona, trimetoxibenceno, (E,E )-2,4-nonadienal, linalol, hexanal, fenilo, etanol, γ- terpineno, linalol, 4- etilveratrol | Hidrocarburos, alcoholes, monoterpenoides acíclicos (linalol), aldehídos, cetonas, ésteres y fenoles |
Compuestos responsables del sabor | Alicilato de metilo, cafeína, catequina, galato de epigalocatequina, benzaldehído y aminoácidos | Ácidos aspártico y glutámico |
Compuestos responsables del color | Teaflavinas, tearubiginas | Clorofila a y b |
Composición y supuestas propiedades del té rojo
Aunque en China se lleva consumiendo más de un milenio, el té rojo ha comenzado a consumirse en Occidente hace tan solo un par de décadas. Parte de su popularidad se debe a su sabor y a su intenso color, pero también a que se le atribuyen propiedades curativas o protectoras frente a diversas patologías, si bien ninguna de estas tiene evidencia científica en humanos como veremos más tarde.
El té rojo tiene vitaminas B, C y D, así como minerales, como el flúor, el zinc, el potasio, el magnesio y el yodo. Es, además una potente fuente de fibra, teofilina, cafeína o polifenoles. Ahora bien, todos esos nutrientes y micronutrientes se refieren a la planta como tal, no a la infusión, donde todos esos componentes quedan muy diluidos. Más aún, no existen estudios concluyentes en humanos con infusiones de té.
La dosis habitual a infusionar suele ser de 3-4 gramos de hojas secas de este té por taza. Harían falta altísimas cantidades de tazas de té para considerar los posibles efectos beneficiosos de esos componentes sobre la salud humana.
El mejor momento para para un pu-erh, ¿mañana o noche?
Son muchos quienes recomiendan tomarlo por la mañana debido a su supuesto poder energizante, adecuado para afrontar el día con llenos de fuerza. Otros, en cambio, prefieren beberlo de noche por la creencia de que ayuda a reducir la hinchazón, a hacer mejor digestiones y, por lo tanto, a conciliar mejor el sueño. En el polo opuesto, están quienes lo desaconsejan porque su capacidad de aumentar la energía podría causar insomnio.
Con la evidencia científica en la mano, Irene Fernández-Espada desmiente a unos y otros. Tomar té rojo antes de dormir o nada más sonar el despertador no va a cambiar nuestra salud de forma determinante.
Los beneficios del té rojo, bajo la lupa
Dado que se le atribuyen tantos beneficios al consumo de té rojo, la experta analiza si a la luz de la evidencia se puede justificar alguno de ellos.
El té rojo, ¿adelgaza de verdad?
Mientras los niveles de obesidad crecen en las sociedades occidentales, se da la paradoja de que también aumentan los estudios en busca de una quimera: los ‘superalimentos adelgazantes’. El té rojo no se libra de esta moda. Un estudio chino realizado en ratones con pu-erh posfermentado rico en polifenoles y cafeína concluye que el extracto de té pu-erh maduro podría prevenir la obesidad al reequilibrar la microbiota intestinal.
La experta recalca que estos estudios deben tomarse con pinzas, ya que solo se han comprobado en ratones con obesidad y síndrome metabólico inducido, pero no en humanos. Y explica así las conclusiones: “Los polifenoles y la cafeína del té rojo habrían contribuido a disminuir el aumento de peso, la acumulación de grasa y la inflamación adiposa”. El estudio señala también una regulación en la microbiota bacteriana intestinal de los roedores, previamente alterada por los científicos. Esta homeostasis bacteriana en el intestino sería finalmente la responsable de un mejor comportamiento ante las grasas y la consiguiente pérdida de peso.
Las conclusiones de este estudio, por tanto, no pueden en ningún caso concluir que el té rojo adelgaza. Ni siquiera que sirva para controlar el peso en seres humanos.
Existe otro estudio japonés en 36 humanos que sí recogió reducciones notables en el peso y la grasa abdominal. Los sujetos del estudio consumieron 33 miligramos de extracto de té pu-erh tres veces al día durante 12 semanas. Y esa es la trampa: los resultados son positivos, pero no tomaban tazas de té, sino un concentrado en polvo.
Fortalece el sistema inmunológico
Otra de las quimeras que acompaña al té rojo son sus supuestos efectos antiinflamatorios, antitumorales, antibacterianos, antiinflamatorios y antivirales. En resumen, unos supuestos poderes medicinales que no cuentan ni de lejos con la evidencia suficiente.
Las teorías que glosan los supuestos ‘efectos farmacológicos’ del té rojo se nutren de estudios como este de la Escuela de Materia Médica China. “El estudio parte de que el té pu-erh es rico en múltiples compuestos activos como flavonoides, catequinas, ácidos fenólicos, polímeros de flavonoles, alcaloides de purina y taninos hidrolizables. Estas cualidades se deben a que es un té fermentado con microbios”, asegura la experta. A partir de esta constatación, los autores del estudio sugieren posibles efectos farmacológicos asociados al té rojo (así los denominan en el título del estudio).
Se trata en realidad de un análisis genérico. No se especifica cómo habría que tomarlo, en qué cantidad y cuántas veces al día para beneficiarse de esos posibles efectos. De hecho, los autores asumen que harían falta estudios más amplios para corroborar esas hipótesis. En otras palabras, no es posible a la luz de la evidencia, afirmar que el té rojo tiene propiedades curativas de ningún tipo, ni preventivas en ningún caso. Y en todo caso, serían efectos asociados a uno o varios de sus componentes, y no al alimento en sí.
Regula el colesterol
Otros estudios con ratones también constatan mejoras en los niveles de colesterol en sangre tras ingerir concentrados de este té durante 30 semanas. De nuevo, los resultados no pueden extrapolarse a la hipercolesterolemia en humanos, ya que no se trata de tazas de té bebido. Y, por supuesto, no es lo mismo el organismo de un roedor que el de una persona.
Protege al sistema nervioso y mejora de la concentración
No pueden atribuirse propiedades de ningún tipo del té rojo como infusión sobre el sistema nervioso de las personas.
Propiedades digestivas
Una vez más, se intentan extrapolar los resultados de estudios con ratones a los seres humanos. Dichos estudios muestran que ingesta de té rojo podría reducir la expresión de la proteína inflamatoria intestinal y otras posibles patologías digestivas. Por interesantes que puedan parecer estos resultados, deben considerarse siempre como experimentos limitados a ratones. En resumen: no se pueden concluir beneficios de ningún tipo del té bebido en infusión sobre seres humanos.
Mejora el sistema cardiovascular
Este mismo estudio refiere la mejoras en los parámetros cardiovasculares, tales como los niveles de lípidos en sangre o la tensión arterial. Pero, una vez más, el modelo se limita a ratones y no puede en modo alguno extrapolarse a humanos.
Propiedades diuréticas, aumento de la energía y reducción del estrés
Estos tres beneficios son muy populares en las redes sociales. Sin embargo, la experta de la Academia Española de Nutrición y Dietética recalca que no hay suficiente evidencia científica para poder afirmar que así sea en el caso del té rojo.
Contraindicaciones del té rojo
El contenido en cafeína de este té desaconsejaría su ingesta en pacientes con presión arterial alta, aunque sin evidencia científica, y en mujeres gestantes. El contenido en cafeína puede oscilar entre 30 y 100 miligramos según la cantidad que se deje infusionar en cada taza y el tiempo de infusión
La experta recuerda que “elevadas dosis de cafeína durante la gestación se han asociado a un aumento del riesgo de patologías congénitas, restricción del crecimiento intrauterino, parto prematuro, aborto y bajo peso al nacer. Durante el embarazo, la ingesta de cafeína no debe ser superar los 200 miligramos al día, equivalente a 6 tazas de té”, concluye la experta.
Para la población general sana, las recomendaciones sugieren no superar los 200 a 400 miligramos de cafeína al día. Esto equivale a 950 mililitros como máximo (unas 4 tazas de té rojo), siempre teniendo en cuenta que el contenido de cafeína depende directamente del tiempo de infusión. Sin olvidar que el cómputo total de cafeína también tiene en cuenta la ingesta de otros alimentos cafeinados, como el café, el cacao, los refrescos de cola y las bebidas energéticas.
El Consejo de ALDI
Los taninos del té afectan al esmalte dental y pueden llegar a oscurecer los dientes si abusamos de esta bebida. Un correcto cepillado de dientes después de tomar té ayuda a tener una sonrisa sin manchas.
Irene Fernández-Espada. Graduada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad Pablo de Olavide, Sevilla. Experta en psiconutrición y especializada en materno-infantil y diabetes mellitus. Colegiada en CODINAN con nº 01123. Vive en Sevilla, donde ejerce la telemedicina y consultas presenciales en Sevilla y Conil de la Frontera (Cádiz). Parte de su tiempo laboral lo dedica a la docencia nutricional infantil impartiendo cursos de alimentación complementaria e infantil a las familias interesadas. WEB: https://ireneespada.com. LINKEDIN: www.linkedin.com/in/irene-f-espada; INSTAGRAM: @Ireneespada_nutricion