La Academia Española de Nutrición y Dietética no está financiada por la industria alimentaria y farmacéutica y es una entidad libre de conflictos de intereses económicos.

ANTECEDENTES

PRIMERO. Ante la reciente publicación en el European Journal of Public Health de un artículo bajo el título “Research partnerships between Coca-Cola and health organizations in Spain” donde se pone de manifiesto los posibles conflictos de intereses económicos de las distintas sociedades científicas y organizaciones asociativas y colegiales con la empresa Coca-Cola España.

SEGUNDO. Habiendo sido publicados datos erróneos extraídos de dicho artículo por diversos medios de comunicación.

El patronato de la Academia Española de Nutrición y Dietética, reunido en Pamplona con fecha jueves 13 de setiembre de 2018,

ACUERDA

Redactar y remitir carta al Jefe Editor de la revista, que hace pública para conocimiento a todos los efectos de los dietistas-nutricionistas de este país, ciudadanos, instituciones, administraciones públicas, gobiernos autonómicos y Gobierno del Estado Español.

Asimismo, y dada la importancia de los asuntos tratados, solicita a todos los profesionales de la salud, en particular dietistas-nutricionistas y otros profesionales de la nutrición, la lectura íntegra de la carta.

En Pamplona, viernes 14 de setiembre de 2018.

CARTA

La Academia Española de Nutrición y Dietética no está financiada por la industria alimentaria y farmacéutica y es una entidad libre de conflictos de intereses económicos.

Giuseppe Russolillo¹*, Cleofé Pérez Portabella¹, Iva Marques-Lopes¹, María Casadevall¹, Martina Miserachs¹, Nahyr Schinca¹, Yolanda Sala¹.

1 Academia Española de Nutrición y Dietética, Pamplona, España.

* secretaria@academianutricion.org

Hemos leído con gran interés el artículo “Research partnerships between Coca-Cola and health organizations in Spain” publicado recientemente en el European Journal of Public Health.

Les escribimos como actual patronato de la Academia Española de Nutrición y Dietética (la Academia), citada en la tabla 1 y en la tabla suplementaria 1 como entidad perceptora de 242 600€.

La actual Academia es herencia de la Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas, que dio lugar en 2013 (a efectos jurídicos) a dos entidades: el Consejo General de Colegios de Dietistas-Nutricionistas de España y la Fundación Española de Dietistas-Nutricionistas (FEDN). Si bien el Consejo General se despojó en dicha fecha de todo conflicto de interés económico relacionado con la industria, la FEDN siguió colaborando con la industria como venía haciéndolo la Asociación predecesora según un estricto protocolo de colaboración publicado en la web, por el que los miembros de la juntas directivas y comités asesores votaban las colaboraciones con la industria a ciegas, es decir, sin conocer la contraprestación económica. En este sentido, entre 2010 y 2016 se percibió de Coca-Cola Company la cantidad de 173 070€, en concepto de: (1) Congresos: organización, stand y conferencias (105 570€); (2) marca Aquabona (marca de Coca-Cola) en página web y agua en los eventos de la institución (67 500€).

A finales de 2016 la FEDN fue transformada en la actual Academia Española de Nutrición y Dietética, y en dicho paso, el actual patronato decidió renunciar a la financiación de la industria alimentaria y farmacéutica, despojándose de sus conflictos de interés para ejercer sus actividades al margen de cualquier sospecha.

En marzo de 2017, y para mayor transparencia, la Academia hizo público la no renovación de todos los contratos firmados con la industria alimentaria por los que percibía dinero y publicó un protocolo para la total transparencia en las políticas de salud de la Academia, junto con unas normas internas establecidas para evitar que la industria pudiera obrar sobre la agenda y actividades de la entidad, incluyendo la formación.

La Academia aprobó “de forma provisional” que la única actividad en la que se permitiría la interacción con la industria para promover el diálogo con los profesionales sería en sus congresos (norma 14). Con el objeto de mantener su condición de “entidad libre de conflictos de intereses económicos” acordó que los beneficios procedentes de las aportaciones de la industria alimentaria y farmacéutica en el congreso serían donados a entidades culturales, sociales, de investigación o de ayuda humanitaria en una votación llevada a cabo por los mismos asistentes al congreso. Además, prohibió la participación de la industria en el programa científico a cambio de contraprestaciones económicas y abrió la posibilidad de presentar trabajos científicos que serían valorados a “ciegas” por el comité científico, dando el mismo trato que al resto de trabajos en formato resumen presentados por los profesionales de la nutrición. Todos aquellos trabajos que superasen la valoración ciega del Comité Científico serían agrupados en una única sesión identificada de forma clara como “Diálogos con la industria alimentaria” para dar la oportunidad a los congresistas a decidir su asistencia. Todas estas normas fueron recogidas y publicadas un segundo documento llamado “Documento Director para la Organización de Congresos de la Academia”.

El patronato de la Academia Española de Nutrición y Dietética ha decidido escribir este comentario al artículo para que quede constancia del error documental existente en la tabla 1 y tabla suplementaria 1, información que debiera haber sido contrastada por los autores del artículo.

El Patronato de la Academia Española de Nutrición y Dietética quiere poner de manifiesto que los datos publicados en el artículo han sido facilitados por Coca-Cola España en un ejercicio de transparencia, algo que desde la Academia exigimos a toda la industria alimentaria y farmacéutica.

La problemática que supone la posible influencia que pueda ejercer la industria alimentaria y farmacéutica sobre las decisiones que toman los científicos o las sociedades científicas va mucho más allá de las contribuciones que haga una única empresa y es un tema de gran calado que debe ser abordado con profundidad y sin olvidar que:

1. Son muchas las empresas que realizan contribuciones económicas y no han sido publicadas en un ejercicio de transparencia.
2. Deben ser las sociedades/fundaciones científicas, asociaciones/colegios profesionales, etc., y sobre todo los científicos y profesionales de la nutrición, quienes declaren sus conflictos de interés económicos con empresas directa o indirectamente relacionadas con la industria alimentaria (incluidas empresas distribuidoras de alimentos).

Las relaciones con la industria alimentaria y/o farmacéutica pueden existir, es algo lícito y no tiene por qué ser negativo o perjudicial, sin embargo, se deben preservar los principios de independencia, trasparencia y proporcionalidad en todas las organizaciones sanitarias y entidades científicas, por lo que el problema surge cuando estos conflictos no son declarados, es decir, cuando no se informa públicamente de las aportaciones recibidas y de su uso. Esta responsabilidad es de las dos partes.

La Academia hace un llamamiento a todas las sociedades científicas/fundaciones, asociaciones/colegios profesionales del ámbito sanitario a que:

1. Inicien un camino hacia la reconversión a organizaciones libres de conflictos de intereses económicos o, en su defecto, hagan público los conflictos de intereses de sus organizaciones y miembros de sus órganos de gobierno.
2. Implementen protocolos para la total transparencia, la integridad y la equidad en las políticas de salud y relaciones con terceros.
3. Eviten participar en las campañas de marketing y comunicación dirigidas a la población a cambio de contraprestaciones económicas.
4. Retiren los avales científicos que hayan otorgado a marcas de alimentos y bebidas.

Para finalizar, el patronato de la Academia se pone a disposición de los editores y autores el artículo para cualquier aclaración o información que precisen con el fin de que el artículo sea rectificado o retirado con explicaciones

El texto completo en inglés remitido a la revista puede descargarse haciendo clic AQUÍ.