La gastroenteritis aguda en los niños es una dolencia frecuente, pero, por fortuna, pasajera. Sin embargo, llena de dudas lógicas a los padres, preocupados tanto por que el niño se recupere, como por hacer lo correcto a la hora de proporcionarle alimentos.
“La dieta para una gastroenteritis no tiene por qué diferir de la dieta para cualquier otro episodio de diarrea o vómitos”, afirma Natalia Hernández, miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética.
Qué es y síntomas de la gastroenteritis
La gastroenteritis es una enfermedad infecciosa del tracto gastrointestinal que se caracteriza por la inflamación del aparato digestivo. En la mayoría de los casos, está producida por virus, bacterias o un parásitos.
“La sintomatología principal es la diarrea, pero puede acompañarse de náuseas, fiebre, vómitos, pérdida de peso, escalofríos y dolor de cabeza”, relata Hernández.
¿Dieta blanda o dieta astringente?
Ambos conceptos se suelen usar indistintamente en el lenguaje coloquial. Como vamos a ver, no son lo mismo.
Dieta blanda
Se refiere a “una dieta de fácil digestión y con poca fibra que ayude a la recuperación del tracto digestivo”, explica la experta. Se usa también, por ejemplo, como dieta de progresión tras las intervenciones quirúrgicas o para tratar los síntomas de acidez, entre otros.
Dieta astringente
Se prescribe cuando el paciente tiene diarrea con el fin de disminuir el número de deposiciones. “Esta es la que debemos hacer en caso de gastroenteritis”.
Las dietas astringentes se basan en la reducción de alimentos ricos en fibra, grasa lactosa. Más adelante veremos qué alimentos son mejores en estos casos.
Con los niños, ¡cuidado con la deshidratación!
En condiciones normales perdemos entre 2 y 2,5 litros al día, por la orina, las heces, el sudor y la respiración. “En cuadros de diarrea extremos podemos llegar a perder hasta un litro por hora”, advierte Hernández.
Por esta razón, la principal prioridad de los padres debe ser conseguir una correcta hidratación. Esta se logra mediante la administración de líquidos o sueros específicos. “Si la diarrea se acompaña de vómitos, la pérdida de electrolitos es mayor y puede que administrar solo agua, no sea suficiente”.
Todo el líquido que administremos al niño debe tomarlo “poco a poco para tolerarlo mejor”, aconseja Hernández.
También se le puede dar al niño caldos desgrasados, infusiones suaves, sueros específicos, … “Nunca Aquarius, ni refrescos de cola, ya que el exceso de sodio y azúcares puede generar más diarrea”, advierte Hernández.
En caso de niños con lactancia materna, “no debemos en ningún momento dejar de lado la leche materna. Todo lo contrario, debemos ofrecerla con más frecuencia”.
Cuando un niño tiene gastroenteritis es normal que los padres se angustien con la idea de cuándo se puede volver a dar alimentos sólidos al niño. Aquí la pauta la marca el organismo de cada niño. Algunos se recuperan muy rápido y vuelven a comer casi como si no hubiera pasado nada. Otros, tardan algo más. Hernández apela al sentido común: “Cuando la tolerancia lo vaya permitiendo, se irán re-introduciendo poco a poco algunos sólidos”.
¿Hay alimentos para cortar la diarrea?
Ante un episodio de gastroenteritis infantil, lo primero es mantener la serenidad. Pero también saber cómo cuidar al niño en esas horas. “Hay alimentos que van a hacer que el niño mejore y otros que en estos momentos son contraproducentes para su recuperación”.
- Leche. No es recomendable porque contiene un azúcar llamado lactosa que es difícil de digerir en caso de diarrea, e incluso puede empeorarla.
- Manzana. Sin piel y cocinada contribuye a parar la diarrea gracias a su contenido en taninos y en pectinas.
- Arroz. Por su contenido en almidón es, junto a la manzana, uno de los alimentos que más nos pueden ayudar a controlar la diarrea.
- Yogur. De fácil digestión y podemos usarlo como probiótico para recuperar la microbiota.
- Pan tostado
- Pollo y pescado blanco hervido
- Plátano. El plátano verde es muy astringente ya que parte de su almidón es de tipo no digerible. Pero puede no sentar también, por eso se aconseja comerlo un poco más maduro, cuando ese almidón se va transformando en azúcar (pero no pasado, porque entonces todo el almidón será azúcar). En resumen, la recomendación es no volverse locos: ni verde ni maduro, tal cual lo compramos en el supermercado.
- Patas hervidas
- Zanahorias hervidas
Algunos ejemplos de alimentos probióticos aconsejables para regenerar la flora tras el episodio de diarrea son el kéfir, el yogur y otras leches fermentadas, como la leche acidófila. “Todos estos derivados lácteos son fáciles de encontrar en el mercado”.
Todos los anteriores alimentos quedan supeditados a los gustos del niño y a su tolerancia durante el proceso. “En caso de diarrea o vómitos el niño debe comer a demanda los alimentos permitidos en la dieta astringente, evitar forzar y tomar poquitas cantidades muchas veces,”, recalca Hernández.
Ejemplo de menú para casos de gastroenteritis
El siguiente menú es solo un ejemplo. Las cantidades variarán según la edad del niño y su apetencia en ese momento. Se deben incluir más alimentos si así el niño lo necesita.
El Consejo de ALDI
El arroz es uno de los alimentos más socorridos en caso de gastroenteritis. Además del clásico arroz blanco de toda la vida, a los niños les suele gustar mucho la sopa de arroz. Es fácil de comer y no suelen poner pegas.
Natalia Hernández. Miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética. Farmacéutica y Nutricionista especializada en nutrición infantil y deportiva intentando unificar ambos mundos para fomentar un desarrollo mas óptimo. INSTAGRAM: @nhrnutricion.